Candy Crush Saga y Criminal Case son los juegos más populares de Facebook en 2013.

Candy Crush Saga es, sin duda, el gran éxito del año. Sea por su compatibilidad no sólo con Facebook, sino también con las principales plataformas móviles, por su planteamiento de juego, tan sencillo como adictivo, o por el componente social que supone contar con tus amigos para obtener códigos o recompensas, el caso es que todos, de una u otra manera, hemos sabido de este título. Con más de 45 millones de usuarios, su planteamiento de juego, muy similar al de las clásicas tres en línea, el jugador debe ir conectando piezas de los mismos colores, todo en una carrera contra el reloj que, a medida que avanzas de nivel, se va volviendo más exigente. Dividido en capítulos, que a su vez constan de varios niveles, Candy Crush Saga se actualiza cada tres semanas para que, incluso aquellos jugadores que ya han completado todos los niveles, puedan enfrentarse a nuevos desafíos. Se trata de un juego gratuito en el que, como comentábamos anteriormente, puedes recurrir a sus funciones sociales para obtener beneficios. No obstante, también cabe la posibilidad de hacer compras in-app, con las que avanzar más rápidamente en su desarrollo.

Criminal Case, por su parte, nos pone en la situación de un investigador que, como no podría ser de otra manera, tendrá que enfrentarse a múltiples escenarios de crímenes, en los que sólo la más aguda observación te permitirá encontrar las pistas necesarias para poder resolver el crimen al que te enfrentas. Su interfaz, muy limpia y sencilla, facilita el empleo de las herramientas de investigación. Eso sí, a diferencia de Candy Crush, y aunque los gráficos de Criminal Case no son muy explícitos, este juego no es tan recomendable para niños, puesto que al fin y al cabo, y al igual que en series y películas del género, la presencia de cadáveres, asesinatos y demás es, lógicamente, una constante.

Llega este juego a la popular plataforma de Facebook. Este es un adictivo juego que tiene una mecánica muy simple pero, dentro de esa facilidad esconde una dificultad importante. El tablero de juego es un huerto repleto de hortalizas. Tiene que intercambiar sus posiciones para alinearlos y conseguir así un “combo”, que tiene como resultado que la línea de pimientos del mismo color se convierte en uno solo pero de mayor tamaño. Cuando una de estas hortalizas ya no puede crecer más, explota y proporciona muchos puntos. Parece sencillo, ¿verdad?

Imaginemos que se le suma que el objetivo real es avanzar por los distintos niveles y que, para ello, lo que ayudará es que provocar reacciones en cadena de pimientos explotando para aumentar más todavía la puntuación obtenida. Parece sencillo y hasta un poco simple. Para ponerle más emoción tiene un número limitado de movimientos y juega contra un reloj que va contando hacia atrás los segundos.

El objetivo a medio plazo de este juego es que el cachorrito Pepper Puppy, muy aficionado es este tipo de pimientos picantes, vaya avanzando por los distintos niveles y llegue a Squawker’s Island. En la versión para Facebook se ha incluido a un antagonista del cachorro, al gato Mister Claws, para ampliar las posibilidades de la mecánica del juego. Y la diversión durará bastante, porque hay nada menos que 70 niveles repartidos en cinco episodios diferentes.

Este es uno de eso juegos casuales. Los juegos casuales no requieren la implicación de otros videojuegos más complejos, cuyas partidas duran horas y que necesitan que dejemos cualquier otra cosa paraq seguir con el juego. Juegos como Candy Pepper Saga cubren una demanda muy interesante.